El gobierno del Chaco, adhirió a las medidas anunciadas por Alberto Fernández.
Con un séptimo caso confirmado y a la espera de más resultados el gobierno provincial adoptó una serie de medidas con el objetivo de contener el avance del coronavirus. Las anunció el gobernador Jorge Capitanich: suspensión del dictado de clases hasta el 31 de marzo, restricción de todo tipo de actividades que supongan aglomeración de personas en lugares públicos como bares y casinos entre otros.
Capitanich puso especial énfasis en el trabajo que se viene realizando "para tener un listado actualizado de todos los chaqueños que viajaron al extranjero o hayan vuelto de otros países con el objetivo de hacer cumplir los protocolos obligatorios de aislamiento social".
Las medidas anunciadas están en un todo de acuerdo con las anunciadas por el presidente Alberto Fernández con el objetivo de "fortalecer el trabajo con Nación, a efectos de contener el avance de la enfermedad".
El gobernador confirmó "que hasta el momento no está probada la circulación viral en la provincia y que los casos confirmados corresponden a personas con antecedentes de viaje o de contacto estrecho con algunas de ellas".
"Estamos en la etapa de contención" explicó el mandatario quien consideró, por consejo del comité de experto al que convocó, "que debemos tomar todas las precauciones y los recaudos necesarios para actuar rápidamente en caso de entrar en una segunda etapa que sería la de mitigación".